Marbella para románticos
Visualice la montaña, las playas de arena fina y las deslumbrantes puestas de sol que tiñen el cielo de asombrosas gamas de rosa y naranja tras Gibraltar, y se dará cuenta de que Marbella está hecha para los románticos. Pero hay más, mucho más, para recomendar esta parte del mundo como punto de encuentro romántico líder en Europa.
Un pasatiempo popular en esta zona es un paseo nocturno por la costa, rematado con una copa al atardecer en un chiringuito para disfrutar de la belleza de esas inspiradoras puestas de sol. Es el broche de oro de la hora del cóctel y, a menudo, el preludio de una cena romántica en uno de los muchos restaurantes de alta cocina de Marbella, los más ambientados de los cuales se encuentran en la Milla de Oro, en el casco histórico de la ciudad y, de hecho, a lo largo de la costa con vistas al mar hasta Gibraltar y el norte de África.
Los paseos en coche por el campo o a caballo por los abundantes parajes naturales de la región también tienen su atractivo, y si quiere una experiencia romántica realmente inolvidable, ¿por qué no disfrutar de un elegante picnic? Los hoteles de lujo de Marbella y sus alrededores le organizarán una deliciosa cesta para un picnic junto a la playa, pero también hay profesionales creativos que se especializan en ocasiones glamurosas y elegantes que llevan los picnics a un nuevo nivel.
Picnic Marbella lo organiza todo para usted, desde la preparación de la comida, las bebidas e incluso el entretenimiento, hasta el montaje en su lugar preferido de Marbella, ya sea la playa, el campo, una colina panorámica, un entorno idílico junto al lago o incluso su jardín o terraza. Elija el encanto diurno o un ambiente romántico nocturno, con velas y antorchas. El tema, el estilo decorativo y, por supuesto, la elección de la comida y las bebidas pueden diseñarse en función de sus deseos.
Imagine el ambiente que tiene en mente, fije la hora, la fecha y el lugar, y ellos se encargarán de todo, para que usted pueda aportar ese otro gran ingrediente romántico: una sorpresa.
Si quiere ir un poco más allá, por qué no reservar una escapada de fin de semana -sea o no San Valentín- para visitar un hotel boutique en el campo, un sitio de glamping, una romántica ciudad andaluza o, mejor aún, un descanso en un spa donde los mimos y la relajación crean el ambiente perfecto para una Marbella romántica.
